Este viernes la foto de la semana la dedicamos a Martha R. Barilari y su proyecto final de curso de especialización en Fotografía Contemporánea, titulado "My own cross". Martha ha expuesto en varios lugares un conjunto de sus obras con el nombre “Colores de ánimo”.
El mensaje de esta obra hace referencia a lo difícil que resulta en muchas ocasiones cargar con nuestros propios miedos, complejos, obsesiones que nos obstaculizan el camino hasta nuestros objetivos, creándonos un fuerte peso emocional y psicológico.
Marta ha utilizado el recurso del autorretrato ya que supone una de las mejores maneras de liberarse y presentarse ante los demás tal cual se es.
Sus referencias básicas son Francesca Woodman, por la introspección que realiza a lo largo de su corta carrera entre soledad y misterio y John Coplans, especialmente en la fuerza de la fragmentación en el montaje y el mostrar un cuerpo real tal cual es, sin retoques que embellezcan y reduzcan las imperfecciones.
El montaje está formado por fotografías individuales de detalles corporales, eligiendo fragmentos y colocándolos en forma de cruz, tanto de la parte frontal como de la trasera.
Los azulejos del fondo le dan una estética retro, antigua, informal, inspirada en Francesca Woodman y, al mismo tiempo, al ser azulejo de cuarto de baño, hace referencia al lugar donde muchos nos refugiamos porque es donde realmente estamos solos con nuestros propios pensamientos.
La luz dura hace resaltar la textura, y un proceso de edición potenciando el grano de la imagen le otorga un aspecto mucho más grotesco.
Marta ha utilizado el recurso del autorretrato ya que supone una de las mejores maneras de liberarse y presentarse ante los demás tal cual se es.
Sus referencias básicas son Francesca Woodman, por la introspección que realiza a lo largo de su corta carrera entre soledad y misterio y John Coplans, especialmente en la fuerza de la fragmentación en el montaje y el mostrar un cuerpo real tal cual es, sin retoques que embellezcan y reduzcan las imperfecciones.
El montaje está formado por fotografías individuales de detalles corporales, eligiendo fragmentos y colocándolos en forma de cruz, tanto de la parte frontal como de la trasera.
Los azulejos del fondo le dan una estética retro, antigua, informal, inspirada en Francesca Woodman y, al mismo tiempo, al ser azulejo de cuarto de baño, hace referencia al lugar donde muchos nos refugiamos porque es donde realmente estamos solos con nuestros propios pensamientos.
La luz dura hace resaltar la textura, y un proceso de edición potenciando el grano de la imagen le otorga un aspecto mucho más grotesco.
Las dos cruces se presentarías enfrentadas, a escala ligeramente mayor que la real, para crear en el espectador, colocado en el centro, un impacto mucho mayor.
Os dejamos con su página donde podéis ver más muestras de su trabajo www.wix.com/fotografiabarilari/fotografia-barilari
¡Enhorabuena Martha!
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