A través de cuatro imágenes acompañadas de un texto cada una, José Antonio nos enfrenta con el día a día de lo simple y lo complejo, mostrándonos un mundo que agoniza y otro que nos mata dejándonos vivir. A la vez actualiza la puesta en valor de copias de fotos con cierta antigüedad, ya que el artista recupera copias de fotos antigüas que retoca para conseguir transmitir un mensaje de reflexión o concienciación en torno a una sociedad consumista y capitalista que gira alrededor del poder del dinero y que tanto se aleja de la humildad e inocencia de pueblos y formas de vida ajenos a toda esta locura monetaria, pero forzosamente llevados a formar parte del "juego".
El propio José Antonio nos lo contaba así:
Al final de los 70 realicé mi primer viaje a la India y me impactó una forma de vida que, aunque muy humilde, presentaba una dignidad asombrosa. Tiré cerca de mil fotografías a color de las que obtuve copias en papel mate. Desgraciadamente el procesado no fue muy satisfactorio; teniendo unos problema graves con la saturación de los colores, con tonos muy apagados y sin fuerza, que, bien es cierto, tenían su encanto. Por extrañas circunstancias no conservo los negativos, pero si las copias. Un día, repasando álbumes de viaje me topé con alguna de las tomas a las que me he referido. Esta casualidad me hizo pensar sobre como vivía aquella gente retratada y como lo hacemos ahora. De esta primera reflexión ha nacido el proyecto que me atrevo a presentar. Por otro lado, fotógrafos como Catalá-Roca, Virxilio Veitez, Uta Barth… unos con su ingenuidad y otros con sus aportes constructivos, me han llevado a la siguiente conclusión: Un mundo ha muerto asfixiado por otro que no nos da oxígeno.
Con esta esclarecedora frase, José Antonio nos deja en ese estado de reflexión acerca de las injusticias sociales que nosotros mismos creamos.
BUEN FIN DE SEMANA A TOD@S!!!